Mireia Carbó
“el poder de un delantal de cocina”
Su relación con la cocina se remonta a la edad de 7 años, cuando cada noche preparaba una tortilla para su abuelo. Su madre trabajaba muchas horas fuera de casa, pues su padre tenía una incapacidad e iba en silla de ruedas.
Su pasión estaba relacionada con la cocina pero las escuelas eran muy caras. “¿Hace falta pagar para pelar patatas?”. Se preguntaba. Así que empezó a cobrar por pelar patatas en diversas cocinas, para poder pagarse sus estudios de cocina en la escuela de Hostelería de Barcelona.
Su principal objetivo era unir su pasión por la cocina con su pasión por transmitir sus conocimientos y formar a personas anónimas en el amor por la cocina.
A través de su escuela se siente recompensada por poder trabajar en algo que le gusta, se siente querida por las personas que acuden y recompensada por poder ofrecer algo útil a los demás.
Ha participado en numerosos programas de radio y ha escrito tres libros:
- “Cocina que no preocupa”
- “La cocina te da juego”
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